Por Luciano Blanco González
Muy torpe será el político que se deje llevar por las eventualidades temporales que lo empujen a tomar decisiones apresuradas, excitado por creer que es el momento propicio para actuar, quien actúa así está condenado fatalmente al fracaso porque no prevé, no planea, no programa, se confía a la suerte
El político profesional debe de proceder en el momento preciso, ni antes, ni después, imitando a la naturaleza con sus estaciones y los ciclos de las siembras y de las cosechas o la gestación humana en que los bebes deben de nacer en el tiempo indicado, antes es prematuro y puede morir, después, puede ser demasiado tarde y nacer muerto.
Es el tiempo y sus circunstancias naturales o creadas las que deben de marcar el paso, así creo que lo interpreta el líder nacional del partido Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, quien ha soportado todo tipo de presiones y descalificaciones de sus adversarios queriéndolo obligar a sumarse a una alianza con la que él no comulga y porque las estadísticas y la historia le están marcando otra ruta para llegar al mismo destino, aunque el camino sea más escabroso y por lo pronto lleno de escollos.
La Alianza por México, en lo general ondea la bandera del Antiamlismo, que pretende sacar del palacio nacional a la Cuarta Transformación y sus rescoldos cualquiera que estos sean, como respuesta a las tundas verbales y electorales que han recibido y reciben, también para afianzar el liberalismo económico y social caracterizado por el respeto al Estado de Derecho, a la autonomía de los tres poderes, al sistema de libertades y justicia en que cree y considera que debe de cimentar, esbozando sus mejores argumentos para conservar sus valores religiosos y de familia.
Esta Alianza de partidos y de sociedad civil, hasta este momento a pasado las pruebas más difíciles desde su creación, no han logrado dividirlos pero tampoco han sumado nuevas fuerzas a su causa, de nada han valido sus ruegos al Movimiento Ciudadano para que se integre a ellos, pero posee una fuerza a la que no es posible medir ni con las dudosas encuestas, es la potencia etérea y dispersa de la sociedad civil, ahora dispuesta a participar y solo se encuentra limitada por un factor insalvable que es la confusión y desde luego el apoyo de sus promotores, El Pan, El Pri, El Prd y los organismos empresariales.
La confusión de la sociedad, será la razón de apoyo que le daría consistencia a Marcelo Ebrard, que se perfila como el hijo desobediente del Amlismo, al mostrarse rebelde, desconfiado, como si hasta hoy se diera cuenta del juego en el que ha estado participando. Marcelo sabía desde el principio que él no era el candidato oficial, sabía que el dedo de palacio ya tenía decidido quien era la seleccionada.
Aun así decidió inmiscuirse en el proceso electivo para muestrearse en una campaña que le diera imagen, teniendo un pretexto para recorrer el país y enseñarse enzarapado en distintos foros en todo el territorio nacional, él desde el inicio debió de percatarse que ya había una estrategia armada, apoyada con los líderes del partido, los gobernantes y con recursos públicos, impulsada directamente por el Presidente.
El Ex Canciller está desesperado, no logro crecer entre sus compañeros de partido, no cuenta con la simpatía de los gobernadores ni de los funcionarios públicos de los gobiernos morenistas, no están con él los servidores de la nación y para camuflagearse e impactar a la opinión pública dice que las encuestas demuestran que va arriba de Claudia Sheinbaum, si así fuera, no se atrevería a cuestionar el proceso, mucho menos a emplazar a los líderes de su partido para que paren a los funcionarios que están aportando recursos financieros y humanos a los demás candidatos, que se detengan los acarreos, que se retire la publicidad, ¿Hasta ahora?, de no creerse..
Marcelo posiblemente no llegue ni a las encuestas en donde podría llevarse la sorpresa de un resultado adverso con un remoto segundo lugar, por eso y para demostrar valor personal, carácter independiente y decisión, simulara que rompe el cordón umbilical con el jefe y que se va para competir por otro partido y ganarle para demostrar que tenia la razón.
Sería ésta una decisión tardía, pues tendría que abrir otro frente, pero no le queda de otra y el único partido al que migraría seria a Movimiento Ciudadano con quien le disputaría el voto de la clase media a la Alianza por México, a cuyos miembros trataría de atraer proclamándose Antiamlista y declarándole la guerra a Claudia, como ya lo viene haciendo desde hace tiempo, puede hacerlo pues la confusión entre el electorado será el agua fuerte que lo pueda fortalecer.
Se iría muy menguado, no lo seguiría ni Ricardo Monrreal, de quien se afirma que ya ligo la La Jefatura de la Ciudad de México a cambio de su apoyo a Claudia, ya veremos cómo reaccionan Clara Brugada y Mario Delgado quienes aspiran a roer el mismo hueso y van bastante adelantados en esta competencia.
Este sería un escenario único del que se puede esperar una lucha feroz al interior de Morena por las gubernaturas, senadurías, diputaciones y ayuntamientos, ya que aquellos Morenistas que no sean postulados por aquel partido, optaran por refugiarse con Marcelo, con lo que peligrosamente se presentara nuevamente el caso Coahuila en el que contendieron hombres de fe Obradorista por distintos bandos, dispersando los votos cautivos y guerreando entre sí, provocando una indeseable desbandada, cuyos desertores pueden provocar la división del partido oficial.
Corresponderá a Andrés Manuel atar todos los cabos e impedir que se suelten, pero en esta actividad es muy difícil encontrar hombres como Enrique De La Madrid que no se mareo y anteponiendo todo interés personal prefirió disciplinarse para no romper la unidad, pero de esos hay muy pocos.
Finalmente habrá que esperar el enorme tendedero que con la ropa sucia de Claudia y Marcelo pondrá Xochilt en el escenario nacional , porque los de ella ya se airearon y los errores del Presidente al ocuparse de ella ya la limpiaron, pero no adelantemos vísperas, aun pueden suceder muchas cosas en esta recomposición de fuerzas a las que abonara todo lo que haga, diga o deje de hacer el presidente, cuyos lances oratorios o la conclusión de sus obras insignias repercutirán directamente en sus candidatos, puede pasar que Marcelo doble al Presidente y este renunciando a todo el cariño que le tiene a Claudia, se decida a apoyarlo, puede suceder que Marcelo decline y en un acto de humildad y de sacrificio renuncie a su aspiración para irse a coordinar la campaña de Claudia como esta pactado, puede suceder que Movimiento Ciudadano se desquebraje pues hay fuertes y enérgicas voces que no comparten la idea de postular a un candidato externo o uno interno que no les garantice el triunfo, esas voces están exigiendo sumarse a la Alianza. Ojala y todos centren sus ideas y sus proyectos primero en el presente y futuro de México y en la solución de sus grandes problemas.- Por el bien de la causa.
